Redmond, Oregón – Hoy, el senador de Oregón, Jeff Merkley, asistió a una mesa redonda sobre pequeñas empresas en el centro de Oregón organizada por el Consejo de Pequeñas Empresas de Oregón para discutir las presiones que enfrentan las pequeñas empresas en todo el estado y la necesidad de una verdadera reforma financiera. El Senador Merkley habló sobre sus planes para la reforma financiera y la necesidad de establecer reglas para Wall Street que ayudarán a mejorar la equidad financiera para Main Street.
"La conversación de hoy con los propietarios de pequeñas empresas subraya el mensaje que he estado llevando en Washington", dijo Merkley. “Millones de estadounidenses están sin trabajo, negocios cerrados y personas han perdido sus hogares porque nuestro sistema financiero fue despojado de responsabilidad y supervisión. Es hora de avanzar con la reforma financiera y hacer que la banca vuelva a ser aburrida –y estable–”.
Merkley se unió a un puñado de propietarios de pequeñas empresas de todo el centro de Oregón en el restaurante Brickhouse en Redmond, Oregón, para hablar sobre las crecientes presiones y desafíos que enfrentan las pequeñas empresas en la región. El grupo discutió los desafíos para obtener el crédito y el capital necesarios para que sus empresas sobrevivan, y la lucha para contratar nuevos empleados y conservar el talento existente.
"Estoy agradecido de que el senador Merkley esté comprometido con las familias trabajadoras y con la provisión de crédito para las pequeñas empresas que mantienen a este país en funcionamiento", dijo Jeff Porad, propietario del restaurante Brickhouse.
La mesa redonda también destacó el trabajo en curso del Oregon Small Business Council y el reciente informe de Main Street Alliance sobre la reforma financiera. A finales de enero, Main Street Alliance publicó un informe que mostraba un apoyo significativo entre las pequeñas empresas a una Agencia de Protección Financiera del Consumidor para regular los productos de crédito al consumo y proteger a los consumidores estadounidenses de prácticas financieras predatorias.
“Cuando los productos financieros están llenos de trucos y trampas, incluso una pequeña empresa rentable y bien administrada puede correr riesgo”, afirmó Merkley. “Durante muchos años, las instituciones financieras han estado comercializando productos defectuosos entre los estadounidenses. Una Agencia de Protección Financiera del Consumidor nos permitirá tomar medidas enérgicas contra estas prácticas y garantizar que un simple préstamo no pueda destruir un negocio bien administrado”.