Una ley de Oregón para impulsar la lactancia al proporcionar a las madres trabajadoras tiempo no remunerado y un espacio limpio para extraer leche materna se está volviendo nacional
A NOSOTROS. los políticos son conocidos por besar a los bebés, no por legislar en su favor.
Los encuentros entre el candidato y el bebé por lo general se acaban en un intercambio de gorgoteos.
Pero este bloque algo volátil, aunque sin derecho a voto (4,2 millones de bebés que nacen cada año en los Estados Unidos) ha encontrado un nuevo campeón en el senador Jeff Merkley, D-Ore.
Puede que no lo recuerdes, pero el 1 de agosto de 2007, Merkley prometió sacudir el mundo de los bebés. Ese día, Merkley anunció su candidatura improbable para el Senado de los EE. UU. en un entorno inusual: un almuerzo banquete para el Consejo de Madres Lactantes de Oregón.
Merkley estuvo allí para ayudar al grupo a celebrar su victoria legislativa de 2007: una nueva ley que exige que las empresas de Oregón brinden a las madres trabajadoras un tiempo mínimo (descansos no remunerados) y un espacio limpio (no un baño) para extraerse la leche materna.
En ese almuerzo, Merkley no solo sorprendió al grupo al anunciar su candidatura al Senado, sino que también prometió, de ser elegido, expandir la ley de Oregón a todo el país.
Bueno, que conste en acta que cumplió su promesa. Lo esencial del programa de Oregón acaba de convertirse en ley nacional. Gracias a Merkley, se incluyen disposiciones muy similares en la legislación de reforma del sistema de salud firmada recientemente por el presidente Barack Obama.