WASHINGTON, DC – El senador Jeff Merkley de Oregón presentó hoy dos proyectos de ley para abordar la creciente amenaza que los químicos de protección solar representan para los arrecifes de coral en todo el mundo y para estudiar el impacto de estos químicos en la salud humana y el medio ambiente.
El Ley de estudio de impacto de oxibenzona y octinoxato de 2019, copatrocinado por la senadora Mazie Hirono (D-HI), requeriría que la Agencia de Protección Ambiental (EPA) estudie los impactos de dos sustancias químicas clave en la salud humana y el medio ambiente. El Ley de seguridad de arrecifes de 2019 requeriría que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) desarrollara estándares para una etiqueta de "Reef Safe" para los protectores solares.
"Si bien la protección solar es increíblemente importante, debemos tomar medidas si estos químicos dañan la salud humana o nuestro medio ambiente", dijo Merkley. "Comprender el impacto total de estos químicos en nuestros cuerpos y en la vida marina es un primer paso fundamental para asegurarnos de que no nos pongamos en peligro a nosotros mismos o a nuestro planeta sin darnos cuenta cuando nos ponemos protector solar durante un día en la playa".
La oxibenzona y el octinoxato son ingredientes de muchos protectores solares comerciales. Estos productos químicos pueden actuar como disruptores endocrinos, dañando el ADN de los corales y dificultando que los corales sobrevivan al cambio climático. Ambos químicos también pueden afectar negativamente a los huevos de tortugas marinas, mariscos, erizos de mar y delfines.
Además, un nuevo estudio de la FDA publicado a principios de esta semana encontró que se necesita solo un día de uso de protector solar que estas sustancias químicas potencialmente peligrosas entren en el torrente sanguíneo de una persona.
Aprender más sobre estos químicos es fundamental tanto para proteger la salud humana como para comprender cómo nuestros sistemas marinos se ven afectados por estos ingredientes de los protectores solares, una comprensión que será clave para prevenir mayores daños al medio ambiente acuático.
La legislación de Merkley exigiría que la EPA estudie los impactos de la oxibenzona y el octinoxato en la salud humana y el medio ambiente, y exigiría que la EPA proporcione al Congreso y al público los resultados del estudio en un plazo de 18 meses.
Además, el Ley de seguridad de arrecifes de 2019 requeriría que la FDA establezca un estándar industrial sobre qué protectores solares pueden etiquetarse como "Reef Safe".